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Carlos Estevez

Fotografía del artista en su taller by Carlos       Estevez






transcripción de la entrevista

Fecha de la entrevista: 16/11/2000
Lugar: Cuba
Tema: Entrevista con Carlos Estévez en su taller en La Habana
Entrevistador: Bill Kelley Jr.

LatinArt:  ¿Cómo has estado estos dí­as de la Bienal? ¿Ocupado?

Carlos Estevez:  Sí­, muy ocupado. Vinieron muchos visitantes. Para entrevistas, curadores, directores de museos, y similares.

LatinArt:  ¿Cuáles son las ideas principales o los temas que inspiran tus obras?

Carlos Estevez:  Mi obra es una suerte de reflexión acerca del estado de la humanidad y las humanidades con relación a su universo. Cuando trato de teorizar lo que hago, encuentro que es algo similar a la poesí­a o la filosofí­a, en el ámbito de las imágenes. Es por ello que mis influencias principales son la literatura, el cine y la vida. Y me interesan mucho todos los materiales, lo cual de un modo u otro delata mi condición humana. Mi obra, con frecuencia, realiza asociaciones y referencias visuales con la religión y con la cultura, que debe lidiar también con la magia. Para mí­, el diálogo que rodea a los materiales es asimismo muy importante, y percibo mis dibujos como obras tridimensionales.

LatinArt:  Hablando de materiales, resulta obvio que ellos tienen mucha importancia en tu obra, tanto en el aspecto económico y social, como en el formato. ¿Cómo influenció tu obra el estudio formal del arte y la práctica de la producción tradicional; el estudio de los materiales, la composición, la textura de la lí­nea?

Carlos Estevez:  Yo estudié pintura a nivel primario, secundario y universitario, y durante esos años estudié pintura y trabajé como pintor. Cuando finalicé mis estudios me aburrí­ de pintar, entonces reconcentré mis esfuerzos en ese discurso, el que te mencioné antes, el que se establece por el uso de materiales. Comprendí­ que la pintura contiene un diálogo a través de la tela y a través de sus materiales. Luego, comencé a trabajar con escultura e instalaciones. Quizás se debe a que heredé algo de la metodologí­a utilizada en ciertas prácticas de magia, en las que los materiales tienen un cierto dominio sobre el mundo. Lo que quiero decir es que una figura escultural realizada en madera no es igual a una figura realizada en hierro. Tiene un carácter simbólico diferente. Sugiere cosas diferentes, pero a la vez pertenece a una herencia cultural distinta. Es por ello que me interesa la aplicación de estas caracterí­sticas en mi obra.

LatinArt:  ¿Y con relación a tus dibujos?

Carlos Estevez:  Con relación a los dibujos, siento que existe una gran influencia proveniente de los métodos de producción de los alquimistas. Una gran parte de la obra es anónima. Me intriga mucho lo sugestivo de las metáforas que contienen la obra y la filosofí­a de la alquimia, un proceso complicado y elaborado para obtener algo que nunca ha sido obtenido. Su herencia es el proceso en sí­ mismo. A su vez, todos los dibujos, todas las copiosas notas, son testimonio del conocimiento adquirido. Algo de lo que yo quiero lograr en mis obras gráficas es similar a ello... un poco como lo que mencioné antes, que cada obra es como una reflexión. Dibujo constantemente obras tridimensionales que realizo, porque ello requiere más tiempo y otras condiciones. Quizás los dibujos me ayudan a atravesar el proceso de pensamiento para avanzar de una escultura a la otra, de una instalación a la otra.

LatinArt:  Como norteamericano que soy, me intereso siempre por cómo la escena artí­stica internacional afecta a los artistas de América Latina, así­ como a los de otras regiones del mundo. Cómo artista joven que reside y trabaja en Cuba, ¿qué pensamientos, si los tienes, posees acerca de ello, y cómo ves tu éxito dentro de la misma escena internacional que afecta a tu trabajo?

Carlos Estevez:  Con respecto al fenómeno de mi obra, o del arte cubano en general, y la escena artí­stica internacional, opino que Cuba, como paí­s soberano de América Latina que es, se encuentra en medio del proceso de un fenómeno muy interesante, con relación a los llamados paí­ses del "primer mundo". En Cuba existen numerosas dificultades económicas y sociales de todo tipo; sin embargo estas mismas dificultades se han convertido en eficací­simas escuelas de aprendizaje, no solamente para los artistas, sino para los Cubanos en general. A veces las barreras inspiran a la gente a enfrentarlas y así­ es que, la escasez de materiales, la escasez de utilización de los mismos, la escasez de información, ha hecho que los artistas abusen de su sentido de la selección, de su conciencia en el momento de crear. ¿Qué están haciendo? ¿Por qué lo hacen? ¿Cómo lo van a hacer? Ya he oí­do decir que los artistas cubanos maduran muy rápidamente. Un artista de veinte años de edad ya ha encontrado un camino para su trabajo, y aunque esta es una edad muy temprana, ya encontró una ví­a sobre la cual trabajar y a la cual seguir. Creo que ello se debe, en parte, a que existen tanto estí­mulos, tanta información, y tanto entre lo que escoger, que a veces es como una dispersión. Por un lado es una ventaja. Bueno, no quiero decir que sea una ventaja, porque serí­a un tema muy complejo, pero es una caracterí­stica muy importante que tenemos los paí­ses más pobres, ya que tenemos tanta historia a partir de la cual escoger. Todo en la vida tiene su protagonista.

LatinArt:  ¿Podrias continuar un poco mas con este tema?

Carlos Estevez:  A menudo en nuestros paí­ses las cosas no funcionan como deberí­an. Cuando enví­as una carta por correo en Europa, tienes 99,9% de certeza de que llegará a su destino. Aquí­ ocurre lo contrario. Es por ello que las partes interesantes de la historia son preguntas. ¿Qué sucedió con esta carta? ¿Quién la tiene? ¿En dónde se perdió? Es el concepto de Alejo Carpentier de que lo real es maravilloso y de que todo puede suceder, lo que provoca un espí­ritu muy imaginativo y muy creativo. Por ejemplo, a los edificios de aquí­ se les está cayendo la pintura, pero cuando entras a un hogar, encuentras objetos de todo tipo y de toda época, en coexistencia. Y esa es una identidad espiritual a nivel cotidiano. Por ejemplo, me parece que Estados Unidos es un lugar que carece de identidad. Vas a algún lugar y ves cadenas de tiendas que se ven todas iguales. Estados Unidos es uno de esos lugares que "establece el ritmo" del resto del mundo y en el cual la idea de progreso se encuentra estrechamente relacionada con ello, pero ese progreso encierra una paradoja que significa alejarse de la humanidad. Es como si no se pudiera encontrar el espí­ritu humano en ningún lugar. Todos tiene una casa, un auto, y la gente vive muy aislada.

LatinArt:  Ese concepto con relación a Estados Unidos es una larga historia. Me recuerda al gran escritor uruguayo, Rodó, cuando cercano al cambio de siglo, su espí­ritu Ariel se enfrentó a la barbarie de Caliban.

Carlos Estevez:  Participé en una exposición de arte cubano organizada por la Arizona State University, titulada "Mundo Viviente". Trataba la idea de que el mundo que habita a nuestro alrededor tiene su propia vida... un mundo de objetos. Se trata de la idea de que cada familia conserva sus objetos, no tanto por razones de celebración, sino por razones prácticas. En los paí­ses pobres, uno no puede remplazar a los objetos fácilmente. En Estados Unidos, si tu automóvil se rompe, puedes remplazarlo. Si el refrigerador se rompe, te compras otro. Pero aquí­, los objetos pasan de generación en generación. Los arreglas, los pintas, inviertes tu tiempo, y creas una relación con estos objetos.

LatinArt:  Por supuesto que una familia entera toca el mismo objeto, y la historia cubre estos objetos como si fuera una pátina.

Carlos Estevez:  Si, así­ es. Creo que el espí­ritu humano se revela cuando el hombre toca estos objetos y les dedica su tiempo y su energí­a, y creo que la gente puede sentirlo. Por ejemplo, ¿ves estas casitas que están en el estante? Son ofrendas hechas a una escultura que se encuentra en el cementerio de aquí­ de La Habana. La historia cuenta que una mujer murió mientras daba a luz y la enterraron, pero resultó que aún estaba viva. Cuando la sacaron de allí­, fue llamada por La Milagrosa. La gente va allí­ y le pide bendiciones de todo tipo, especialmente relacionadas con la vivienda, y estas casitas son una forma de agradecimiento. En la vida real, todos los hogares tienen cuatro paredes y un techo, pero cada hogar tiene su personalidad individual... Con estas piezas voy a producir una instalación. Si caminas por la Vieja Habana, verás que cada hogar es un mundo aparte. La pobreza logró, en este caso, que las distancias humanas no sean tan abismales.

LatinArt:  Me interesa mucho tu lenguaje pictórico: la naturaleza, el cuerpo humano, la maquinaria y la tecnologí­a. ¿Puedes hablarme sobre estos elementos en particular?

Carlos Estevez:  Como te explicaba antes, uno de los elementos más fundamentales de mi obra es que el cuerpo humano funciona como un mapa que alberga al espí­ritu humano. Me interesa profundamente la idea de los mapas, porque ellos representan algo que no puede verse. De algún modo, nos muestran un espacio que debemos construir en nuestra mente. El mapa, su representación y el espacio real, son cosas completamente diferentes. Es por ello que me agrada la idea de representar al cuerpo como un mapa. El cuerpo como un documento. Bueno, la palabra documento no es muy exacta...

LatinArt:  ¿Te refieres al cuerpo como un texto?

Carlos Estevez:  Sí­, exactamente, el cuerpo como si fuera un texto. Textos de espiritualidad; textos de historia y de filosofí­a. Me interesa asimismo la arqueologí­a que el hombre ha creado de sí­ mismo... la arqueologí­a del hombre. He encontrado metáforas en medio de la retórica, que señalan hacia una descripción ontológica de la humanidad. Es por ello que muchos de mis dibujos son analogí­as entre objetos y cuerpos humanos, o entre objetos y animales. Y esta comunión nos proporciona una dimensión metafórica diferente con relación a este tema.

LatinArt:  Como estudiante del barroco, me interesan profundamente tus ideas sobre la religión y el lenguaje pictórico del arte barroco. ¿Puedes decirme algo más acerca de ello?

Carlos Estevez:  Me interesa muchí­simo el barroco como concepto. De cierto modo creo que el barroco es una filosofí­a también. Con relación a ello, lo barroco, el concepto de aglomeración, de confluencia, es útil, sobre todo en el mundo contemporáneo en el que coexisten numerosos mundos que cohabitan en forma simultánea. Me parece una idea muy interesante, con numerosas posibilidades.

LatinArt:  ¿Cómo crees que cambiará la escena artí­stica cubana en los próximos cinco años?

Carlos Estevez:  Esta es una pregunta muy compleja... una pregunta muy comprometedora. Me parece que en los últimos años ha habido una apertura muy interesante. La historia de las bellas artes ha atravesado de diferentes etapas aquí­ en Cuba, algunas de ellas sumamente crí­ticas. Con relación al arte, ya que esto es acerca de lo que puedo hablar, ya estudié para ello, considero que estamos atravesando una época muy rica e interesante porque el arte se está debatiendo frente a nuevos requisitos, por ejemplo en el mercado del arte... y ese es un fenómeno muy complejo... muy complejo.




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