Entre el mes de noviembre del 2009 y Enero del 2010 se realizó la exposición Reciprocidad en el Centro Cultural de España en la ciudad de Buenos Aires (CCEBA) bajo la coordinación de Federico Zukerfeld y Loreto Garin Guzmán. Esta exhibición colectiva buscaba romper las fronteras generacionales, locales e internacionales, el adentro y afuera del circuito de arte contemporáneo, intentando ubicarse en una o varias constelaciones posibles, que permitan visualizar nuevas cosmovisiones y estrategias, en un mundo que ha degradado sus estructuras. Reciprocidad fue integrada por obras y proyectos de: Zanny Begg (Australia), Oliver Ressler (Austria), Claire Fontaine (Paris), Democracia (España), y los argentinos León Ferrari, Iconoclasistas, la cooperativa Sub, Leo Ramos, Alejandra Fenochio y Diego Haboba. Se publicó un catalogo disponible que contó con un texto del teórico y curador canadiense Stephen Wright quien propone una visión crítica a tono con el carácter de esta exposición, y abre la puerta para un merecido debate sobre las condiciones especificas del sistema de arte actual: “Hacia una reciprocidad extraterritorial: más allá del mundo del arte y de la cultura vernacular” Como actividades asociadas se realizaron charlas y proyecciones en las que se invitó a Marcelo Expósito (España) y a la editorial independiente )elasunto(. - Como nace la idea de Reciprocidad. ¿Desde dónde, por qué? A comienzos 2009 fuimos invitados a realizar una exposición en el Centro Cultural de España en Buenos Aires por Laura Spivak, artista y curadora que se desempeñaba como programadora de los espacios de arte de esta institución. En vez de exhibir nuestras obras personales optamos por presentar la propuesta de una exposición que reúna imágenes, ideas y obras de otros con quienes encontramos vínculos de reciprocidad afectiva, política, estética. Nuestra anterior experiencia en la coordinación artística de una exposición colectiva, fue para La Normalidad(1) (última parte del proyecto “Ex Argentina”) realizada en el Palais de Glase en Buenos Aires (febrero del 2006). En aquella oportunidad conformamos un equipo junto con el artista Eduardo Molinari y redactamos un texto(2) para el catálogo donde nos preguntábamos sobre el estado de situación del sistema social y sus repercusiones en el campo del arte. En aquel contexto, La Normalidad hablaba justamente acerca de un supuesto retorno a la normalidad pos-2001, con la superación de la crisis de representación, el retorno al orden social y la economía formal. Fue nuestra intención darle continuidad a las ideas que enunciamos entonces cuando utilizamos el concepto de Inclusión Permanente. “La inclusión simbólica como ilusión: idea de volver a pertenecer a un proyecto algo…” para describir como operaba la reinserción en los sistemas sociales y económicos. La “recuperación”de aquellos sectores que habían sido expulsados o marginados creó nuevos mercados o revitalizó los ya existentes. En la cultura, por un lado se hizo evidente la creciente tendencia hacia la ONG-ización de cuanto proyecto autónomo existiese, insertándose ahora en el área de “servicios”o corriendo desesperados a la caza de subsidios y recursos del gobierno de turno o fundaciones extranjeras. Por otro lado, la normalización se materializó en un auge del reciclaje de la historia reciente, con una explosión de archivismo crónico y así fueron apareciendo cientos de nuevos-viejos archivos de experiencias sociales, políticas, artísticas. Finalmente, la inevitable catalogación de las prácticas, movimientos o experiencias que habían surgido como gestos o reacciones de coyunturas de crisis, incorporándolas y promoviéndolas ahora como tendencias, convirtiendo a sus actores/protagonistas en consumidores eventuales de sus propias experiencias. La intención de organizar esta exposición surge entones de la continuidad de aquella experiencia, cuando tuvimos la posibilidad de poder organizar y coordinar la exposición, catálogo, ciclos de cine y video activismo, charlas y talleres. A su vez pudimos participar ideológicamente de la narración de esa exposición, partiendo de nuestras esperanzas y visualizaciones acerca del proceso social que comenzó a fines de los años 90 y se acentúo tras la explosión de la crisis económica del 2001 hasta el 2006, en donde se pudo visualizar el fuerte proceso de normalización que vivía la sociedad argentina. Espejos Desde aquella experiencia nos quedo claro que había una dificultad muy fuerte para la realización de este tipo de proyectos en el plano local (e internacional), ya sea porque los recursos son entregados a eventos de otras características o por los fuertes prejuicios hacia lo que se ha denominado “arte político”, al cual se piensa con una idea de segregación extrema y se los mantiene lo mas alejado posible de las instituciones y sus recursos. A su vez porque muchos de los proyectos de estas características que se realizan en nuestros países latinoamericanos son financiados desde Europa occidental o Estados Unidos, y por lo general son dirigidos por curadores o agentes culturales extranjeros, lo que dificulta aún mas la posibilidad coordinar los esfuerzos buscando provocar influencias en el circuito local. Nos preguntamos entonces por que no intentar invertir el tablero y poner nuevas piezas en este juego dando un jaque a la corona, al producir una imagen-espejo de las propias tensiones y contradicciones. Probar que ocurriría cuando se revierten las jerarquías, tanto territoriales, como económicas y curriculares. A ese proyecto lo llamamos “Espejos” Pensamos en un espacio-tiempo, en donde al mirarse hacia adentro y hacia fuera, se intentase ver con mayor amplitud de radio a los excluidos y excluyentes. Hacer una operación de reciprocidad entre imágenes y sujetos involucrados, entre la narración, los episodios narrados y los protagonistas, paradoja antropofágica entre consumidores y consumidos. El título original de “Espejos”surgió como metáfora de aquellos episodios vividos por los pueblos originarios durante los primeros tiempos de la llegada de los colonos a territorios americanos, donde se les intercambiaban fragmentos de espejos ilusorios a cambio del preciado Oro y otros bienes que ellos poseían. Cuando fuimos invitados a exponer al CCEBA pensamos que era el momento justo para generar el primer eslabón de este proyecto más amplio y lo llamamos Reciprocidad. ----- 1) La exposición La Normalidad fue realizada en Febrero de 2006 en el Palais de Glase en la Ciudad de Buenos Aires. Organizada por el Goethe Institut de Buenos Aires y con la coordinación artística de Alice Creischer, Andreas Siekmann, Loreto Garín Guzmán, Eduardo Molinari y Federico Zukerfeld. Reunió a más de 45 artistas y grupos provenientes de países como Argentina, Rusia, Chile, Brasil, Alemania, Holanda, Francia y Austria. Fue la tercera y última parte de ExArgentina un proyecto iniciado en 2002 que incluyó el Congreso “Planes para escapar de las visiones panorámicas”realizado en Berlín en noviembre de 2003 y la muestra “Pasos para huir del trabajo al hacer”llevada a cabo desde marzo a mayo de 2004, en el Museo Ludwig de Colonia, Alemania. Mas información: www.exargentina.org 2) Del texto “La Papa Caliente”Garín Guzmán / Molinari / Zukerfeld, paginas 5,6,7 en “La Normalidad- ExArgentina”ISBN 987-1180-33-0 , Interzona Editora.
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