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En "You Are Here" /Tú estás aquí/, por ejemplo, una instalación en video de tipo "performance", realizada con los pacientes del Hospital Psiquiátrico Nirgua de Venezuela, se realiza una compleja trama de narrativas que emanan del yo/lo otro que luego se trasponen a otras categorías con la intención de debilitarlas. De ese modo, los pacientes son el elemento subordinado de la dinámica del yo/ lo otro y a través de dicha deferencia se figuran otras dicotomías para elucidar un "diagnóstico" más completo de los pacientes y sus enfermedades. Por lo tanto, la salud es lo opuesto a la enfermedad, lo racional a lo irracional, la cordura a la demencia, etc. De acuerdo con la psiquiatría occidental dichas faltas de equilibrio se entienden como de tipo psicológico y somático, pero son interpretadas por Foucault como una sintomatología de la alienación social engendrada por los circuitos de poder; una necesidad histórica de establecer y prolongar el control del estado. Pero si Téllez se estuviera refiriendo solamente a asuntos tales en su obra, por atractivos que fueran, no resultarían en nada más que un didacticismo florido recalcando una rigurosa crítica institucional.
Este no es el caso ya que lo que resulta evidente de la obra en general de Javier Téllez no es solamente su poesía crítica y visual, sino una comprensión de estas dicotomías que tienen base en la filosofía, el psicoanálisis, la historia, la sociología y la antropología, por nombrar solo algunas disciplinas. Ellas, a su vez, se integran formal y conceptualmente en su obra con temas, ideas, tropos y estrategias extraídas de una serie de fuentes incluyendo la literatura, la historia del arte, la arquitectura y la cultura popular. Las interpretaciones erróneas de la obra de Téllez no carecen de méritos al explorar sus matices y sutilezas: los "políticamente correctos" han interpretado "You Are Here", así como otras obras realizadas en colaboración con pacientes psiquiátricos como de explotación; o que propugnan una meta-posición de autoridad moral en sus análisis de la historia de la psiquiatría, su formación y su discursividad en general, y su rol como extensión del estado. Pero la obra de Téllez opera en el ámbito de lo otro para disminuir el ímpetu de la psiquiatría en aras del bienestar universal que marginaliza cualesquiera formas sociales que no se adapten a la normativa de lo que el estado considera como social y políticamente aceptable. Empático con lo que ostensiblemente puede verse como transgresor, "You Are Here" resuena con la noción humanista y ética de lo otro sostenida por el filósofo y académico talmúdico Emmanuel Levinas, donde la identificación del yo con su opuesto se torna equivalente a la necesidad moral (3). Se hace también referencia a la hermenéutica filosófica de Hans-George Gadamer: "La hermenéutica adquiere un rol central en la visión de la experiencia humana. Este sentimiento por la individualidad de las personas, la percepción de que no pueden ser clasificadas y deducidas de acuerdo con reglas o leyes generales, es un importante nuevo enfoque sobre lo concreto de lo otro [letra cursiva, mía](4).
El concepto de Levinas sobre lo otro y la hermenéutica de Gadamer se evidencian en "You Are Here" de numerosas maneras. La libertad de los pacientes para hacer lo que desean en el video, se ejemplifica en su juego espontáneo con una pelota gigante en los jardines del hospital, que sin embargo, dentro del contexto de su internación, es un intento de hacer valer su independencia social, aunque breve, por medio del debilitamiento del aparato administrativo y la voz autoral del artista que llama la atención sobre el estado de alteridad de los pacientes. Si bien sabemos que "You Are Here" es una obra de arte, la cesión de autoridad artística por parte de Téllez permite una cierta libertad en los pacientes al disminuir la dicotomía sujeto/objeto que se encuentra subyacente en la relación tradicional entre el artista y la obra de arte. De hecho, la obra opera como una intervención "situationist" en el espacio social con su propia dirección aleatoria y se desenvuelve en un tiempo real social que de manera transgresora atrapa el aspecto arquitectónico de la internación institucional. Es en este "juego de diferencias" que los pacientes pueden articular su desenfrenado deseo innato de su propio potencial terapéutico auto-guiado. Dentro del desempeño colectivo de los pacientes existe también una multiplicidad de acciones, que si bien es esporádica, inconsciente y en ocasiones determinada, desmantela el yo/ lo otro y lo difumina de acuerdo con la rúbrica del concepto del rizoma de Gilles Deleuze (5).
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